En estos tiempos más que nunca es necesaria la motivación, y la forma en que esta es planteada por quien la da, no siempre es bien recibida por quien la recibe.
Hoy día se utilizan principalmente tres formas de motivación en el entorno empresarial.
El uso del temor o castigo.
Este tipo de reforzamiento negativo si tiene alguna validez, la historia nos ha demostrado que únicamente es a corto plazo, ya que a largo plazo suele terminar en revuelta. Además, pensemos ¿cómo puede prosperar una empresa que tiene a su fuerza creativa y productiva sumida en el temor?
El incentivo económico.
Esta idea es recibida con mucho agrado, aunque termina siendo ineficiente a medio y largo plazo si es la única forma de motivación empleada. El ser humano tiene la capacidad de adaptarse y acomodarse a casi cualquier situación, y una en la que te valoran económicamente cualquier esfuerzo es de fácil adaptación. Esto, más pronto que tarde lleva a vincular trabajo con recompensa cada vez mayor, por lo que es predecible que pronto las exigencias de las recompensas sobrepasarán las posibilidades de las empresas, y entonces el sistema se volverá inestable.
Reconocimiento y desarrollo personal.
La tercera formula mas utilizada consiste en reconocer constantemente el trabajo bien realizado así como facilitar que la persona pueda crecer y realizarse profesionalmente. Entonces la motivación vendrá a través del sentido de orgullo personal.
Algo que podría ser recomendable seria lograr una óptima combinación de las dos ultimas.
¿Qué opinas? ¿Qué otros métodos de motivación conoces?
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No estoy seguro de que se pueda realmente motivar. Se puede, sin duda, desmotivar, y se puede también crear las condiciones para que las personas se motiven. Uno debe motivarse a sí mismo. Esto se lo oí al Dr. Mario Alonso Puig hace ya bastantes años y me «sonó raro» en aquella ocasión, pero lo he ido observando desde entonces y cada vez soy más escéptico sobre la posibilidad de motivar a alguien.
Es cierto que la motivación ha de salir de uno mismo, pero desde fuera pueden darte un empujón puntual, como el ‘starter’ del coche. Para que los efectos de ese empujón sean un poco más a largo plazo, no es suficiente con usar una estrategia de desarrollo personal (las otras dos difícilmente pasarán de un empuje puntual), sino que se ha de escoger un camino de crecimiento que coincida con los objetivos de la persona, y esto es mucho trabajo individual con cada persona (que, por otro lado, se ve recompensado).
[…] This post was mentioned on Twitter by Jose Miguel Bolivar, Daniel Aguayo. Daniel Aguayo said: Comentando en: Y tú, ¿cómo motivas? http://bit.ly/5tvpqB /por @laTrinchera […]
La motivación siempre sale de uno mismo, de dónde si no 😉 Otra cosa es cómo se metió ahí, la jodía. Hay que observar por tanto qué entornos y experiencias continuadas o puntuales generan motivación y de qué tipo, y cuáles no la generan.
Yo creo que la motivación es un 50% externo y un 50% interno. Ya sea que lideres un proyecto o formes parte de él. Si los que te rodean no te facilitan tus funciones ni a su vez están motivados, tarde o temprano tú mismo te desmotivas, pero como consecuencia de la fata de estímulos externos. Véase el caso de los niños que en el colegio han sido problemáticos y luego se ha comprobado que eran superdotados que carecían de estímulos adecuados.
Una cosa que motiva sobremanera es el ambiente de trabajo. Si hay gente interesante que te ayuda y te motiva cada día o por el contrario se respira un ambiente «de presión» y desconfianza. Creo que la motivación se trabaja cada día, desde uno mismo, su esfuerzo y su trabajo.
besos
María
Hola
Estoy de acuerdo con JM Bolívar. No podemos motivar mucho. Es difícil, poco eficiente y extraño. Cada uno tiene que encontrar su motivo y el jefe no debe quitarnos nuestro motivo. Es más fácil y eficaz No desmotivar aunuqe por supuesto es más difícil.
Saludos
Motivación. Es muy complicado motivar, porque el target del motivador tiene que ser igual al target de la persona motivada 🙂 si esto no ocurre, se corre el riesgo de : manipular, desmotivar, alejar y crear bastante confusión! Total, que para motivar primero hay que tener en cuenta cual es el objetivo de la motivación 🙂 incentivar a vender más nuestros comerciales cansados de ser esclavos sin futuro? Ofrecer ilusión a dependientes que son maquinas programadas? Motivar un amigo o un conocido a perseguir un objetivo que ni el mismo desea conseguir?
Aquí entran en juego unos factores muy importantes : el sentido común y el ser proactivo, elementos que se encuentran mucho entre los trabajadores autónomos y las empresas innovadoras con modelos nuevos de comparticipación en el negocio. En la mayoría de los casos no creo que haya mucha transparencia por parte de quién quiere motivar, encontramos solamente objetivos personales aislados, tipo vender más o al revés, mantener un triste puesto de trabajo.
Cada persona es un microcosmo, lo que pasa que todavía no nos damos cuenta 🙂 la única forma posible es la automotivación y el saber estar abiertos a las novedades que son siempre oportunidades!
Contestando a todos….
José Miguel, yo también se lo oí decir al Dr. M. Alonso Puig, y sin embargo creo que principalmente uno ha de estar abierto a la motivación, y entonces es más fácil dejarse motivar por el entorno… como dices Daniel, en ocasiones ese empujón marca la diferencia de que alguien se ponga en marcha o siga igual que siempre. De hecho en ocasiones como coach, mi labor ha consistido en buscar y pulsar ese “starter” y luego la persona ya funcionaba sola.
Yoriento, estoy de acuerdo que la motivación es interior, ahora tu mismo dices que la puedes “encontrar”, “disparar”, “generar” desde experiencias o entornos exteriores… nuevamente creo que llegamos al mismo punto.
Y coincido con Juan Carlos (creo que todos más o menos decimos lo mismo) en que es en parte externa e interna, aunque yo creo que los porcentajes variarán y mucho según personas y circunstancias.
Totalmente de acuerdo con María en que la motivación es una labor diaria…
Como dice Álex y supongo que Yoriento estará también de acuerdo (jejeje): si no ayudas a la motivación, al menos no estorbes…
Christian, efectivamente podemos pretender motivar a alguien en beneficio propio o no, aunque entiendo que es ya elección de cada uno. Para mi motivar significa animar a alguien a hacer algo que quiere o que simplemente ha de hacer, de forma más alegro, con ilusión y ganas.
Mi resumen:
¿Alguien quiere añadir algo más?.
La verdad que me ha encantado las aportaciones… para mi, aportan más que el propio post… muchas gracias 😉