T. Harv Eker
Miles de veces a lo largo de la historia el hombre ha demostrado que no hay problema suficientemente grande, que todo es posible, con motivación suficiente y un poco de creatividad.
De hecho yo prefiero llamarlos dificultad, ya que la palabra problema tiene (al menos para mí) mayor peso emocional, y al fin de cuentas no son más que formas de describir las cosas.
¿Tu dificultad es más grande que llegar a la luna? ¿es más grande que tirar un cable submarino de comunicaciones a través del océano y que dure muchos años? supongo que no, y por eso me atrevo a decir que con toda probabilidad tu problema se resolverá a poco que decidas hacerlo, si no es de un modo será de otro.
¿Por dónde vas a empezar?